¿Sabías que un hallazgo inesperado en 1938 cambió la historia de los materiales?
Roy J. Plunkett, en DuPont, encontró el politetrafluoroetileno de forma accidental mientras trabajaba con gas tetrafluoroetileno. La patente llegó en 1941 y la marca comercial se registró en 1945.
Este material destaca por su antiadherencia, baja fricción y gran estabilidad térmica. Sus usos iniciales incluyeron recubrimientos y sellos en equipos que manejaban hexafluoruro de uranio durante proyectos estratégicos.
Con el paso de los años, la investigación y el análisis técnico impulsaron su salto a aplicaciones domésticas, incluyendo sartenes en México. Es importante distinguir entre PTFE y PFOA: no son lo mismo y los estudios en poblaciones altamente expuestas requieren interpretación cuidadosa.
En esta sección te explicamos qué es la ciencia detrás de la antiadherencia, cómo llegó a nuestros hogares y qué datos clave debes recordar sobre su evolución en el tiempo.
Principales conclusiones
- Descubrimiento accidental en 1938 por Roy J. Plunkett; patente en 1941 y marca en 1945.
- PTFE ofrece antiadherencia, bajo coeficiente de fricción y amplia estabilidad térmica.
- Sus aplicaciones tempranas fueron industriales y estratégicas, lo que aceleró su adopción.
- Hay que diferenciar claramente entre PTFE y PFOA por razones de salud pública.
- La llegada a las cocinas mexicanas fue resultado de años de investigación y desarrollo.
Mito vs. realidad: ¿la carrera espacial inventó el teflón?
Una confusión cronológica ha ligado el material antiadherente a los programas espaciales, pero la evidencia histórica muestra otra ruta.
Investigación y datos indican que el descubrimiento ocurrió en 1938, décadas antes de los vuelos orbitales.
La primera vez que este polímero fue crítico fue en plantas que manejaban elementos corrosivos durante la Segunda Guerra Mundial. No fue diseñado para naves.
«La narración simplificada suele atribuir avances a la carrera espacial; la realidad histórica es más compleja.»
- Confusión: una persona puede usar la metáfora espacial y alterar la percepción.
- Transición a productos domésticos: sartenes en los años 50.
- Contexto militar e industrial precede su uso en el mundo del hogar.
| Periodo | Uso principal | Resultado |
|---|---|---|
| 1938 | Descubrimiento en laboratorio | Polímero sin aplicación masiva |
| Años 40 | Aplicación estratégica (plantas y sellos) | Protección frente a compuestos corrosivos |
| Años 50 | Productos de consumo | Sartenes y utensilios antiadherentes |
Si quieres ver cómo se discuten otros escenarios hipotéticos, consulta este análisis para comparar relatos y cronologías.
El origen del teflón: historia científica, creación y propiedades

Una botella fría que no liberó gas llevó a un descubrimiento inesperado. Roy Plunkett almacenaba tetrafluoroetileno para un nuevo refrigerante cuando notó que el cilindro mantenía el peso.
Roy Plunkett y la polimerización accidental
Al abrir el recipiente se encontró una sustancia blanca y cerosa. La polimerización bajo presión transformó ese gas en un sólido con un alto punto de fusión y un coeficiente de fricción mínimo.
Segunda Guerra: UF6 y aplicaciones críticas
En los años posteriores, la química mostró su valor en procesos que manejaban hexafluoruro de uranio. La gran resistencia frente a agentes corrosivos hizo que se empleara en válvulas y sellos en instalaciones de enriquecimiento.
De un polímero a una familia
Químicamente, este polímero es análogo al polietileno, pero los átomos hidrógeno se sustituyen por átomos flúor. Ese cambio en los átomos crea cadenas con inercia química única.
Propiedades clave
La sustancia tolera temperaturas extremas y actúa como aislante eléctrico. Esa combinación de baja fricción, resistencia y estabilidad convirtió un accidente en una familia de productos: FEP, PFA y otros fluoropolímeros.
«Una casualidad en el laboratorio dio paso a materiales imprescindibles para industrias que demandan desempeño extremo.»
Aplicaciones y usos actuales en México: industria, cocina y más
Desde líneas de ensamblaje hasta cocinas caseras, su presencia es palpable en múltiples sectores. En plantas mexicanas se valora por su resistencia química y su capacidad para operar a distintas temperaturas.
Industria y energía
En la industria, se usa en sellos, empaques y recubrimientos para procesos agresivos. Su bajísimo coeficiente de fricción protege articulaciones y reduce el desgaste.
Eso permite evitar lubricantes en algunas piezas, lo que simplifica mantenimientos en equipos de energía y transporte.
Cocina y hogar
En la cocina mexicana aparece en sartenes antiadherentes, barnices y pinturas que facilitan la limpieza y el deslizamiento de objetos.
También se emplea en muebles y periféricos para mejorar el movimiento de sillas y ratones en oficinas y casas.
Electrónica y medicina
Por su capacidad dieléctrica se usa en cables y condensadores de alta fidelidad dentro de cadenas de suministro locales.
En el sector salud, su inercia y flexibilidad permiten prótesis, vasos y otros implantes que requieren biocompatibilidad.
«Su familia de fluoropolímeros complementa al polietileno cuando se necesitan propiedades que otros plásticos no ofrecen.»
- Manufactura: integración en procesos químicos y de alimentos.
- Productos: dispositivos médicos, cables, mangueras y utensilios de cocina.
- Panorama México: adopción creciente en años recientes en sectores clave.
Para una nota periodística sobre el debate en sartenes y salud, consulta este reportaje.
Seguridad, PFOA y salud pública: datos, estudios y buenas prácticas
Para entender riesgos reales hay que revisar estudios y separar términos. El material antiadherente no es idéntico a los compuestos usados en su producción. Esa confusión ha provocado alarmas innecesarias.
PFOA no es PTFE: evidencia y contexto
Varios estudios epidemiológicos en comunidades con alta exposición a PFOA reportaron asociaciones con cáncer de riñón y testículo, colitis ulcerosa y otros desenlaces.
El C8 Science Panel realizó un análisis exhaustivo; esas conclusiones aplican a personas muy expuestas, no al recubrimiento final. Es clave diferenciar.
Uso responsable en cocina: temperatura, humos y cuidado
No sobrecalientes sartenes vacías: al alcanzar cierto punto de temperatura pueden generarse humos irritantes.
Ventila, evita utensilios que rayen y reemplaza piezas con recubrimiento dañado. Con buen mantenimiento, el uso cotidiano resulta seguro.
«Separar evidencia científica de mito ayuda a decisiones prácticas en el hogar.»
- Recomendación: alterna con acero inoxidable o hierro fundido en cocciones intensas.
- Mantenimiento: usa silicón o madera y revisa el recubrimiento con el tiempo.
Conclusión
Lo que empezó como una anomalía en un cilindro de gas se volvió una parte clave de muchas industrias. La creación fortuita del polímero en 1938, su patente en 1941 y la marca en 1945 marcaron años decisivos.
Su resistencia frente al hexafluoruro y al uranio durante la Segunda Guerra permitió soluciones críticas. Luego, sus propiedades —bajo coeficiente de fricción, inercia química y estabilidad a distintas temperaturas— abrieron aplicaciones en medicina, electrónica y cocina.
En la práctica, controlar la temperatura, vigilar el recubrimiento y reemplazar piezas dañadas mantiene la seguridad. Conocer la investigación y los límites del material ayuda a aprovechar su capacidad sin confundir riesgos.