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El mito de que los soldados de Napoleón le volaron la nariz a la Esfinge.

Napoleón y la Esfinge

¿Sabías que una famosa película reciente revivió una leyenda histórica? La cinta de Ridley Scott muestra a tropas francesas disparando contra monumentos egipcios, alimentando la idea de que el emperador destrozó nariz de la Esfinge. Pero aquí hay un giro: ¡la verdad es mucho más antigua!

Dibujos realizados en 1737, décadas antes de que tropas europeas llegaran a Egipto, ya muestran al monumento sin su apéndice nasal. Este detalle desmonta por completo la teoría popular. ¿Cómo pudo alguien dañar algo que ya estaba deteriorado?

La respuesta podría estar en registros del siglo XV. Historiadores como al-Maqrizi mencionan a un líder religioso que, en 1378, destruyó parte de la estatua al oponerse a rituales agrícolas. Este hecho, menos conocido pero mejor documentado, explica el misterio mejor que cualquier leyenda sobre soldados franceses.

¿Por qué persiste este mito? Las figuras carismáticas y los monumentos icónicos crean narrativas atractivas. Sin embargo, contrastar fuentes revela que, a veces, la realidad supera a la ficción.

Conclusiones clave

  • La película de Ridley Scott reavivó un mito sin base histórica sólida
  • Evidencia visual de 1737 prueba que la nariz faltaba antes de Napoleón
  • Documentos medievales señalan a un líder religioso como responsable real
  • Los mitos persisten por el atractivo de figuras históricas famosas
  • Verificar fuentes es crucial para separar hecho y ficción

Origen y evolución histórica de la Esfinge

Al pie de las pirámides de Guiza, un coloso de piedra vigila el desierto desde hace milenios. Esta maravilla arquitectónica combina cabeza humana y cuerpo león, creando un símbolo de poder que desafía al tiempo.

La construcción y las leyendas antiguas

Expertos vinculan su creación al faraón Kefrén hace 4,500 años. La estructura de 20 metros muestra restos de pigmento rojo en el rostro, sugiriendo que originalmente estaba pintada. Curiosamente, ningún texto del Reino Antiguo menciona su existencia.

El nombre actual proviene del griego «sfigx» (estrangulador), aunque su significado egipcio original se perdió. Durante siglos, las arenas la cubrieron casi por completo, lo que explica por qué Herodoto no la registró en sus crónicas.

El enigma de la nariz: teorías y evidencias históricas

Documentos del siglo XV revelan la verdadera causa de su rostro dañado. Muhammad Sa’im al-Dahr, un fanático religioso, destruyó la nariz en 1378 para detener rituales agrícolas locales. Las autoridades lo ejecutaron por este acto de vandalismo.

La piedra caliza de baja calidad aceleró su deterioro. En 1988, un bloque de tres toneladas se desprendió del hombro derecho, demostrando los desafíos de preservación. Actualmente, fragmentos de su barba postiza se exhiben en el Museo Británico.

Napoleón y la Esfinge: entre mito y realidad

En el verano de 1798, una flota francesa cambió el curso de la egiptología moderna. El general Bonaparte llegó al país del Nilo con un doble propósito: conquista militar y descubrimiento científico. Entre sus hombres destacaban mentes brillantes como el matemático Gaspard Monge, cuyo trabajo ayudaría a descifrar misterios ancestrales.

La expedición científica de Napoleón en Egipto

La misión reunió a 167 expertos en diversas áreas. «Es un lugar para conquistar gloria y saber«, declaró el líder francés antes de revelar su destino final. Estos investigadores documentaron monumentos, estudiaron flora local y crearon los primeros mapas detallados de las pirámides.

El descubrimiento de la puerta secreta y los mapas de la meseta

Durante las excavaciones en Guiza, surgió un hallazgo intrigante. Auguste Mariette reportó una puerta permitía acceder a cámaras internas en la base del coloso, según registros históricos. Los soldados limpiaron toneladas de arena, revelando estructuras ocultas por siglos.

Este trabajo sentó las bases para exploraciones futuras. Curiosamente, durante su visita a la Gran Pirámide, el militar francés experimentó un episodio místico que aún intriga a los historiadores. Sus mapas precisos siguen siendo referencia en arqueología moderna.

FAQ

¿Es cierto que los soldados de Napoleón destruyeron la nariz de la Esfinge?

No hay evidencia histórica que respalde esta teoría. Estudios y registros indican que la nariz ya estaba dañada siglos antes de la llegada del general francés a Egipto. Algunos documentos del siglo XIV mencionan a un fanático religioso, Sa’im al-Dahr, como responsable.

¿Por qué se relaciona a Napoleón con el daño a la Esfinge?

El mito surgió por su expedición en 1798, que incluyó investigaciones en la meseta de Guiza. Sin embargo, su equipo documentó la estructura ya deteriorada. La confusión aumentó por rumores sobre prácticas de tiro al blanco, pero no existen pruebas concretas.

¿Qué descubrió realmente Napoleón en la gran pirámide?

Durante su campaña, se halló una puerta oculta en la cara norte del monumento. Aunque no se pudo acceder al interior en ese momento, este hallazgo impulsó estudios posteriores que revelaron cámaras y pasadizos internos.

¿Cuál era el objetivo de la expedición francesa en Egipto?

Además de fines militares, Napoleón llevó científicos y arqueólogos para estudiar la cultura local. Su trabajo permitió descifrar jeroglíficos gracias a la Piedra de Rosetta y documentar monumentos como las pirámides y el cuerpo de león de la Esfinge.

¿Existen registros que desmientan la participación de Napoleón en el daño a la Esfinge?

Sí. Dibujos del siglo XVIII, previos a su llegada, muestran la nariz faltante. Además, textos árabes medievales describen su destrucción en 1378, vinculándola a protestas contra cultos religiosos no islámicos.
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